- No se trata de dejar de exportar, sino de satisfacer la demanda interna
- Con opciones más asequibles
Ciudad de México. La incertidumbre provocada por los aranceles a la exportación de vehículos mexicanos a Estados Unidos, hace necesario que se ajusten las políticas públicas para consolidar el mercado interno, afirmó Guillermo Rosales Zárate, durante la presentación del libro Industria Automotriz en México: Historia de la producción, distribución y exportación de vehículos, que fue hecha en la Cámara de Diputados. El presidente ejecutivo de la AMDA dijo que no se trata de abandonar el perfil manufacturero y exportador de alta calidad del país, sino de satisfacer la demanda interna de vehículos con opciones más asequibles y que satisfagan las necesidades de una población mucho más grande.
De acuerdo con Rosales Zárate, Brasil es el ejemplo de como un país que ha sabido impulsar su mercado interno, ya que cerró el primer trimestre de este 2025 con una producción de medio millón de unidades y una venta interna muy parecida; en el mismo periodo México produjo más de 973 mil unidades, de las cuales exportó el 80% (776 mil unidades), mientras que las ventas en el mercado interno fua superior a 370 mil unidades. “¿Qué nos dice esto? Que Brasil, con un mercado y una población que casi duplica a México, tiene una producción que apenas llega a la mitad de la nuestra. ¿Por qué? Porque en Brasil casi el 80% de su producción es para el mercado interno y lo poco que exporta lo dirige al resto de Latinoamérica y muy poca de la producción brasileña se manda a los mercados más exigentes donde los vehículos mexicanos tienen una reputación forjada a través de la mejor calidad del mundo”.
Lo que necesitamos para impulsar el consumo interno de autos son reglas claras e incentivos a la compra y a la propia producción local, ya que actualmente el 80% se exporta, y de este porcentaje el 70% va a los Estados Unidos. El directivo de la AMDA agradeció el espacio al Poder Legislativo la apertura al diálogo y los invitó a continuar la discusión fiscal de la recaudación de la Industria Automotriz y que su ajuste podría ayudar a impulsar el mercado interno, “desde 2008 está topada la deducción de vehículos nuevos en los 175 mil pesos en cinco ejercicios fiscales, cuando con la actualización, este año el monto debería estar en 450 mil pesos”, subrayó. Esta facilidad fiscal sería bueno implementarla en el Plan México que impulsa la Presidente Claudia Sheimbaum como parte del cambio perfil exportador de nuestro país hacia lo Hecho en México. Así mismo, respaldó las negociaciones que está llevando a cabo en el tema de los aranceles anunciados y, sobre todo, de involucrar a las instituciones públicas del financiamiento para impulsar la renovación del transporte público, amén de subsidios fiscales y programas de chatarrización.
Rosales Zárate hizo un llamado a la Presidente para que, como otra medida para mejorar el mercado interno que ella misma pretende, termine con la regularización del contrabando automotriz, el cual hasta el momento lleva más de tres millones de unidades regularizadas con lo que se expone la seguridad vial y el ambiente, además de que vienen a entorpecer y disminuir la cadena de la renovación vehicular de nuevo por seminuevo y de seminuevo por usado.